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Posponer el mantenimiento del aire comprimido cuesta más dinero del que ahorra.

Las correas trapezoidales, los cartuchos separadores, los filtros de aire, las esteras filtrantes, los refrigerantes y los lubricantes, así como los fluidos de funcionamiento, son sólo algunos ejemplos en los que un mantenimiento inadecuado o diferido de los componentes puede tener graves consecuencias. Esto puede incluir la disminución de las tasas de separación, el aumento del consumo de lubricante, el daño a los rodamientos o el aumento del desgaste de los materiales o, en el peor de los casos, daños irreparables en el propio bloque compresor.

Como parte de su Campaña del 10%, la British Compressed Air Society -la asociación comercial del Reino Unido para la industria del aire comprimido y el vacío- analiza la importancia del mantenimiento para ayudar a reducir el consumo de electricidad de los sistemas de aire comprimido y evitar el derroche innecesario de energía.

Afirma que "cuando el aumento de los costes de la energía es una preocupación, tiene sentido asegurarse de que el sistema funciona de forma eficiente, y un régimen de mantenimiento eficaz del aire comprimido puede ayudar a reducir los costes".

"El mantenimiento del sistema de acuerdo con los intervalos de servicio recomendados por el fabricante es esencial, no sólo para garantizar una larga vida útil y un funcionamiento fiable, sino para ayudar a priorizar el rendimiento energético. El uso de piezas de repuesto originales, instaladas por un agente de servicio autorizado, reducirá los costes de reparación, minimizará el tiempo de inactividad y mejorará la eficiencia energética."

En otros lugares de Europa, en su directriz "Sistemas de aire comprimido: funcionamiento seguro y económico", la VDMA -la mayor organización en red de fabricantes de maquinaria de Alemania- destaca la responsabilidad de cada empresa en el funcionamiento seguro de los sistemas de aire comprimido.

En lo que respecta a los compresores estacionarios, afirma que parte de esta responsabilidad es, entre otras cosas, la selección de una empresa de servicios de confianza, que debe hacer las recomendaciones de mantenimiento apropiadas tan pronto como se entregue y ponga en marcha un sistema de aire comprimido.

Fabricantes como CompAir destacan que, entre otras consideraciones, un filtro de aire sucio aumenta la presión diferencial, lo que a su vez conlleva un mayor consumo de energía y, en última instancia, tiene un impacto directo en la factura eléctrica global del centro.

Tanto BCAS como los expertos de la VDMA señalan también que hay que procurar utilizar piezas de repuesto y componentes de alta calidad que cumplan las especificaciones del fabricante para mitigar los riesgos de las paradas de los equipos.

Los cambios en el equipo de trabajo o en las prácticas pueden requerir una revisión de la evaluación de riesgos, lo que refuerza aún más la necesidad de respetar los ciclos de mantenimiento recomendados, incluso en tiempos económicamente volátiles.

CompAir -un fabricante líder mundial de sistemas de aire comprimido de alta eficiencia energética- está trabajando con sus clientes mientras navegan por los actuales desafíos geopolíticos y económicos. A través de su red de ingenieros de servicio locales y formados en fábrica, la empresa ofrece un mantenimiento integral proactivo y predictivo, que ayuda a los fabricantes a mantener los equipos funcionando al máximo rendimiento y a evitar facturas de reparación innecesarias en un momento de aumento de los precios de la energía.

Para más información, visite www.compair.com