Noticia

El último informe de Energy Efficiency Movement (EEM) sobre eficiencia energética en la industria (“The Case for Industrial Energy Efficiency”) menciona duplicar la eficiencia energética como el factor que genera más emisiones en la industria durante esta década, y propone 10 acciones clave a los líderes industriales para mejorar la eficiencia energética.

Entre ellas, el informe destaca tres pasos fundamentales para construir las bases de la eficiencia:

1. Auditar las operaciones orientadas hacia la eficiencia energética
2. Dimensionar adecuadamente los activos y los procesos industriales
3. Añadir conectividad a los activos físicos

David McDonald, Head of Power Generation and Fuels de Aggreko, proporciona algunos pasos tangibles para ayudar a las empresas a poner en práctica estas acciones:

“El informe de EEM es muy oportuno porque cita muchas de las medidas que hemos aconsejado adoptar a la industria desde hace mucho tiempo. El punto de partida para cualquier empresa que trate de aumentar su eficiencia debería ser dar un paso atrás y reevaluar los requisitos de energía de las plantas. Necesitamos una perspectiva general del perfil de la carga, incluidos su nivel de referencia y cargas bajas y picos de carga. Esto puede ayudar a identificar los activos sobredimensionados”.

Según David, una de las principales causas del sobredimensionamiento energético es la falta de conocimientos sobre la demanda variable de la carga. Así, en algunas plantas hay un generador de gran tamaño para cubrir las demandas de la carga durante una pequeña parte del día, o solo para cubrir las necesidades en el arranque. Como resultado de ello, se deja el generador funcionando con cargas más bajas y con una menor eficiencia durante el resto del día; a veces es de tan solo el 20%.

En este sentido, David aboga por equipos y sistemas de almacenamiento de energía en baterías (BESS) en función de la demanda como posibles soluciones: “Una solución que tenga en cuenta la carga sustituye a un generador de gran tamaño por varias unidades más pequeñas que se activan o desactivan automáticamente dependiendo de los requisitos de la planta. Esto garantiza que los picos queden cubiertos sin necesidad de que el generador funcione con una carga inferior al nivel óptimo durante el resto del día. También ofrece la oportunidad de añadir resiliencia si es preciso”.

“Por otro lado, un sistema BESS puede ofrecer el arranque asistido por la batería en plantas que precisen una corriente de arranque especialmente elevada. Esto permite dimensionar de forma correcta el generador principal de acuerdo con los requisitos de la carga. En algunos casos, esto se puede aprovechar para alimentar pequeñas cargas durante largos períodos o para superar las limitaciones de la capacidad cuando la conexión a la red eléctrica es limitada”.

Tras la instalación, David cree que la monitorización remota puede ayudar a las empresas a controlar el uso de la energía con el fin de evitar deficiencias o activos mal dimensionados en el futuro. Y concluye: “Todos nuestros equipos incorporan la solución ARM (Aggreko Remote Monitoring) de serie que nos permite analizar los datos de forma continua. Así podemos ver si la carga del generador es sistemáticamente demasiado alta o baja, e introducir los cambios necesarios”.

“Recomendamos a toda empresa que trate de aumentar su eficiencia que busque los conocimientos y la experiencia de un proveedor especializado. Podemos ayudarle a conocer la verdadera demanda de electricidad de su proyecto y a encaminarse para aumentar su eficiencia en la práctica”.

www.aggreko.com